Bienvenida

Somos la Federación Nacional de Sindicatos de Trabajadores de Empresas Lácteas y de los Alimentos de Chile, FENATRAL, fundada el 21 de marzo de 1988.
Federación abierta que agrupa Sindicatos de Soprole, Prolesur, Comercial Santa Elena, Quillayes-Peteroa, Lácteos del Sur, Diana Naturals, Lácteos Kumey, Recex y recientemente Sindicato de empresa Elabal y al día de hoy, congregamos sobre los dos mil trabajadores.
Estamos afiliados a la Confederación del Alimento de Chile, Confedach, y a través de ella a la Central Unitaria de Trabajadores, CUT y a la Unión Internacional de Trabajadores del Alimento, U I T A.
Los invitamos a participar en este proyecto, compartiendo información, navegando en los temas expuestos, enviando sus comentarios, aportes y críticas, e invitando a otras organizaciones y amigos a visitar y a enlazar esta página.
Una Página Web de Verdad vale más que 100 mentirosos canales de Tv

viernes, 21 de octubre de 2011

21 de octubre 1906: Fundación de la Fech

La Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh) es la más antigua asociación estudiantil de Chile. Fundada en los albores del siglo XX, el 21 de octubre de 1906, bajo el incondicional apoyo del rector del Partido Radical, don Valentín Letelier, para defender los derechos y representar las opiniones de los estudiantes de la Universidad de Chile y para brindar asistencia social a los trabajadores y los desposeídos. Pese al apoyo de Letelier, y sobre todo después de su renuncia al sillón de Bello, comenzó paulatinamente a enfrentrarse con el establishment universitario. Pese a esto, se convirtió en un actor importante de la vida social y política chilena.
Desde 1907 organizó las primeras manifestaciones estudiantiles en las que cuestionó incluso al propio rector Letelier. El enemigo tradicional de los estudiantes fue la Universidad Católica de Chile, institución dilecta del conservadurismo político. Con el tiempo los enfrentamientos con los estudiantes católicos se volvieron periódicos. En 1911 la organización apoyó al académico alemán Max Westenhofer de la Facultad de Medicina, cuando este fue expulsado de la Universidad y del país, por escribir un polémico documento (El Informe Westenhofer), donde criticaba la precaria situación en que vivía la clase obrera de Chile.
La FECh no fue parte del movimiento latinoamericano de Reforma Universitaria. Sus actividades estudiantiles y asistencialistas como la Universidad Popular Lastarria que tenía como fin de educar a las clases trabajadoras o las escuelas nocturnas para obreros fueron parte de las acciones tradicionales que efectuó desde su fundación. Es en esta época cuando se fundan los dispensarios (farmacias gratuitas) de los estudiantes del área de la Salud y las clínicas jurídicas donde los estudiantes de derecho gratuitamente aportaran sus conocimintos a los más pobres, actividad que terminará siendo absorbida por la institucionalidad. También por su influencia, los estudiantes de liceos comenzaron a organizarse, constituyendo en 1919 la Federación Chica.
En el ámbito cultural, la Federación se destacaba en aquella época, mediados de la década de 1910, por ser la organizadora de las Fiestas de la Primavera y el Día de los Estudiantes, actividades que derivaron en un enfrentamiento cada vez más claro con la cultura católica y conservadora al punto, que los estudiantes de la Universidad Católica comenzaron a celebrar sólo esa fiestas.
En los años 1920 se consideraba anarco-sindicalista. Su medio de difusión era la revista Claridad, que tuvo como redactores a Alberto Rojas Jiménez, Juan Gandulfo, Alfredo Demaría, José Santos González Vera y Pablo Neruda. Desde esa tribuna la Federación de Estudiantes cuestionó a gobiernos como el de Arturo Alessandri Palma. Esto le significó la destrucción de su sede el 21 de julio de 1920, tras denunciar la falsedad de Guerra de don Ladislao por una horda de jóvenes católicos, conservadores y militares.
En la revista escribieron grandes de la literatura chilena, americana y mundial como Pablo Neruda, Juan Gandulfo, Manuel Rojas, José Santos González Vera. Nació poco después de la muerte del joven poeta José Domingo Gómez Rojas, figura que se transformó en un mito en sus páginas.
En los años 1930 la FECh organizó la participación decisiva del movimiento estudiantil contra el gobierno de Carlos Ibáñez del Campo, lo que terminó con su derrocamiento en julio de 1931. El mito dice que uno de los líderes de aquella movilización fue Salvador Allende que fungiría como vice-presidente de la organización, quien décadas más tarde llegaría a la presidencia de la República como el primer mandatario socialista elegido por sufragio libre y universal. Pero no hay ninguna prueba documental que Allende fuera dirigente, pero sí destacó en uno de los grupos estudiantiles más importantes de la época, el Grupo Avance, cuna de muchos líderes políticos de izquierda.
En 1940 el presidente de Facultad de Arquitectura Jorge Niño de Zepeda, fundó la Escuela Nocturna para Obreros de la Construcción (ENOC), para educar a la clase obrera, la que se mantiene en funcionamiento hasta la actualidad en dicha Facultad.
En 1948 la Federación destacará en su lucha callejera oponiéndose a la promulgación del la Ley de Defensa Permanente de la Democracia más conocida como Ley maldita, por considerar que con el pretexto de defender la democracia se condenaba los pensamientos o ideología de las personas y no las acciones. Esta ley implicó la expulsión de antiguos miembros de la FECH de sus cargos (Rudecindo Ortega, Pablo Neruda, etc). Nueve años después la organización fue una de las convocantes a las jornadas de abril de 1957 contra el segundo gobierno de Ibáñez.
Hacia 1967, los estudiantes universitarios impulsaron el proceso de Reforma Universitaria. Este movimiento que hundía sus raíces en lo acontecido en Córdoba en 1918, fue parte de una oleada de rebeldía estudiantil a lo largo de todo el continente latinoamericano y del mundo que tuvo variadas expresiones: desde el "mayo francés" y los acontecimiento de la Universidad de Berkeley hasta los que buscaban poner la Universidad al servicio del pueblo, democratizando la cultura y la enseñanza. En Chile este movimiento comenzó en las universidades católicas -que eran más conservadoras y donde el contraste era más agudo- pero rápidamente llegó a la Universidad de Chile, que era la principal universidad del país, poniéndose la Federación a la cabeza del proceso.
Al igual que Frei Montalva lo hizo seis años antes, el 4 de septiembre de 1970, el entonces Presidente de Chile electo Salvador Allende dio su discurso de la victoria desde los balcones del edificio de la FECH. Durante la Unidad Popular, al igual que el resto de la sociedad chilena, la Federación vivió una profunda radicalización y apoyó el proceso revolucionario en gestación, no sin oposición interna, que derivó en tomas de establecimientos como la acontecida en al Facultad de Derecho en 1972, controlada por estudiantes Demócrata Cristianos.
Después del golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973, el régimen militar clausuró la Federación y persiguió a sus principales dirigentes acusados de atentar contra el gobierno. En remplazo de esta se estableció la Federación de Centros de Estudiantes de la Universidad de Chile (Fecech), la cual tuvo entre sus presidentes a Pablo Longueira. Ésta se caracterizó por adherir a la línea del gobierno en contraposición de sus antiguos líderes. En 1979, en un congreso clandestino de dirigentes universitarios se restableció la Federación y compitió de forma paralela con la organización oficialista, hasta superarla a comienzos de 1980. Durante esa década la FECh se dirigió críticamente contra las políticas educacionales de la dictadura. En 1987 logró convocar a un paro general de la Universidad, incluyendo a la casi totalidad del claustro académico, de los funcionarios y de los estudiantes contra el rector designado José Luis Federici, paralizando las funciones de la Universidad por dos meses, hasta que, en una gran victoria política, el gobierno militar se vio forzado a reemplazarlo por Juan de Dios Vial Larraín.
El gobierno militar separó de la institución las sedes regionales y otros institutos que la Universidad había creado. Esto implicó que las organizaciones estudiantiles separadas en las regiones se independizaran, pero que las que eran de Santiago como la del Instituto Pegagógico y el Instituto Profesional de Santiago siguieran participando en la FECH aún cuando jurídicamente pertenecieran a otras universidades (UMCE y UTEM). Eso explica que la elección de Arturo Barrios no fuera reconocida por el rector de la época ya que este era alumno del ex- pedagógico. Esta situación se prolongó hasta entrado los 90` cuando las directivas de dichas organizaciones decidieron separarse.
Al regreso de la democracia, la FECh cayó en un período de profunda crisis, culminando en su cierre en 1993 por falta de quórum en las elecciones generales. Fue refundada al año siguiente por un movimiento liderado por el estudiante comunista Rodrigo Roco.
Durante esta época destacarán la evolución de los trabajos voluntarios organizados por la FECH. Durante la dictadura estos tenían un carácter marcadamente político dadas las circunstancias, pero tras el plebiscito del 88 serán de trabajo social en medicina, veterinaria, construcción de salas, juegos infantiles y sedes sociales, etc. Esto traerá como consecuencia que las demás organizaciones estudiantiles evolucionen sus propios trabajos en forma similar y que luego el Estado cree un proyecto para que los jóvenes profesionales colaboren en zonas aisladas: Proyecto País.
La Fech ha adoptado a lo largo de su historia, diferentes formas de organización. Históricamente la Federación ha sido disputada por organizaciones estudiantiles de clara filiación política sea partidista o no.
Actualmente funciona con una mesa directiva compuesta por cinco cargos anuales elegidos en votación universal estudiantil integrándose la directiva mediante el sistema de cifra repartidora, siendo ésta presidida por el candidato más votado de la lista más votada, el cual recibe el cargo de Presidente, con el cual ejerce la vocería de la Federación. El resto de los integrantes de la mesa directiva son electos a partir de los mismos candidatos a la presidencia de la FECh, conformando así la Vicepresidencia, Secretaría General, Secretaría de Comunicaciones y Secretaría Ejecutiva. Además existen seis secretarías ejecutivas que se preocupan de los diferentes ámbitos del quehacer estudiantil. Éstas son: Secretaría de Comunicaciones; Área Social; Centro Extensión Artística y Cultural (CEAC); Computación Estudiantil; Trabajo Universitario; Deportivo Estudiantes; Proyectos Estudiantiles.
La Federación cuenta así mismo con un órgano deliberativo llamado Pleno de Federación, donde participan los presidentes o voceros de cada estructura local (generalmente Centros de Estudiantes) y los Consejeros Fech, elegidos por votación universal en cada Facultad para dicho efecto. Además, aunque sin voto en el Pleno de Federación, cuenta con tres Delegados de Bienestar y un Delegado de Deportes, elegidos por votación universal estudiantil.
Para Fenatral, y dado la presencia permanente de la Fech en el conflicto estudiantil actual, es de mucha importancia mostrar la trayectoria social de la organización máxima de los estudiantes de la Universidad de Chile (información recogida de www.wikipedia.org).

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Fenatral

Fenatral