Bienvenida

Somos la Federación Nacional de Sindicatos de Trabajadores de Empresas Lácteas y de los Alimentos de Chile, FENATRAL, fundada el 21 de marzo de 1988.
Federación abierta que agrupa Sindicatos de Soprole, Prolesur, Comercial Santa Elena, Quillayes-Peteroa, Lácteos del Sur, Diana Naturals, Lácteos Kumey, Recex y recientemente Sindicato de empresa Elabal y al día de hoy, congregamos sobre los dos mil trabajadores.
Estamos afiliados a la Confederación del Alimento de Chile, Confedach, y a través de ella a la Central Unitaria de Trabajadores, CUT y a la Unión Internacional de Trabajadores del Alimento, U I T A.
Los invitamos a participar en este proyecto, compartiendo información, navegando en los temas expuestos, enviando sus comentarios, aportes y críticas, e invitando a otras organizaciones y amigos a visitar y a enlazar esta página.
Una Página Web de Verdad vale más que 100 mentirosos canales de Tv

jueves, 9 de abril de 2020

Trabajadores: Derechos Laborales y Pandemia

Este 2020, estaba proyectado como un año lleno de desafíos para FENATRAL, con las legítimas y necesarias muestras de unidad y solidaridad sindical, por cuanto es un año de Negociaciones Colectivas de casi todos los Sindicatos afiliados a nuestra organización, todo ello dentro del contexto socioeconómico en la que nos encontrábamos viviendo, luego del histórico 18 de octubre de 2019, día del llamado Estallido Social, Chile Despertó o la Revolución de los 30 pesos, en el que la ciudadanía con un grito guardado por más de 30 años de frustraciones y miserias, sale a las calles en constantes y multitudinarias manifestaciones, esto sumado a la contracción de la economía a nivel mundial, el fuerte aumento de los niveles de cesantía en nuestro país y la precarización de las condiciones de trabajo a manos de un Director del Trabajo con una mirada absurdamente empresarial, pero los eventos que siguieron cambiaron totalmente el panorama a nivel local y mundial.

En China, en la ciudad de Wuhan, el día 1 de diciembre de 2019 se detectaba por primera vez a un grupo de trabajadores del mercado mayorista de mariscos de esa ciudad, una neumonía de causa desconocida, la que fue luego identificada como Síndrome Respiratorio Agudo Grave (SARS COVID-19), la que se comenzó a extender rápidamente a través del mundo, originando además una alta tasa mortalidad en diferentes países, siendo declarada como Pandemia Mundial por la OMS recién el día 13 de marzo. 

En Chile el primer caso de esta pandemia fue detectada el día 3 de marzo en la comuna de San Javier en un médico de 33 años. que procedía de un viaje desde Singapur, y de allí en adelante el número de casos de contagiados por este virus ha ido en un rápido y constante aumento con cifras de muertos también en aumento.

Este estado de alerta sanitaria nos ha obligado a todas y todos los trabajadores de Chile a cambiar nuestras rutinas, donde los primeros fueron los de la educación cuando los estudiantes fueron obligados a quedarse en sus casas al decretar una suspensión temporal de las clases. Muchos alcaldes hicieron llamados a mantener una cuarentena voluntaria en sus comunas, a estar atentos a la evolución de la pandemia y a estar alertas a los paulatinos anuncios del gobierno para intentar asegurar el contagio, fue así como se decreta estado de excepción constitucional el día 18 de marzo, luego cuarentena -de acuerdo a la cuantificación de casos-  para diferentes zonas de nuestra larga y angosta faja de tierra, además que dentro de los anuncios realizados está el de “mantener la cadena de suministros” como una forma de entregar un poco de tranquilidad a la ciudadanía y de esta manera evitar la creciente ola de pánico y aglomeraciones en lugares donde abastecerse de productos para pasar esta crisis sanitaria.

Sin embargo en plena evolución de la crisis sanitaria, hemos sido testigos de la poca capacidad de este gobierno para tomar decisiones que privilegien asegurar el empleo y los derechos de los trabajadores, quienes ven expuesta su salud a diario al salir de sus casas en busca del sustento de sus familias. La promulgación de dictámenes en los que se precarizan aún más las condiciones laborales de nuestros compañeros y compañeras, en los que se les da libertad a los empresarios para pagar la mitad del salario o simplemente suspender el pago de los sueldos durante la duración del estado de excepción constitucional, so pretexto de fortalecer la ya alicaída economía de nuestro país. En contraste con la tramitación de leyes que buscan eximir del pago de contribuciones al 10% más rico de Chile, mientras los quintiles más bajos de nuestra población -la gran mayoría- son "subsidiados" desde sus propios fondos de cesantía o de dineros fiscales a través de bonos con montos bajísimos que no permiten subsistir a ninguna familia, demostrando con esto una completa desconexión con las necesidades reales de los trabajadores y sus familias.

Ante este escenario y como una medida de poder fomentar el conocimiento de lo que a diario se está modificando FENATRAL a través de este Blog, comparte con sus socios y trabajadores en general algunos enlaces que les permitirán mantenerse informados de las medidas que día a día sean comunicadas por los órganos oficiales, como de información contingente a través de nuestra Internacional UITA:
Nuestros sindicatos afiliados tienen una tarea adicional por cuanto las empresas donde laboran sus socios, son precisamente las llamadas de primera necesidad y pieza fundamental en algunos casos de la canasta básica de alimentación para nuestra población, por lo que los esfuerzos de todos y cada uno de nuestros compañeros y compañeras han estado enfocados en mantener las actividades que aseguren cumplir con los suministros para las necesidades de la población, dando un valor agregado a la ya importante labor que desempeñamos día a día en nuestras compañías, por tanto es deber de FENATRAL, reconocer el increíble esfuerzo que realizan los trabajadores y socios de nuestros sindicatos afiliados y por ello cuenten con todo el apoyo y dedicación con que nuestra organización seguirá velando por los derechos de todas y todos.

“Yo odie a la raza humana. 
Y la quise ver morir. 
No sabía lo que estaba pensando, porque en realidad amo a esas señoras viejitas que llevan bolsas al mercado, o a esos señores antiguos que van en bicicleta a su empleo.
 Amo a esa gente que disfruta con tan poco. 
La especie humana que vibra, se emociona, llora y ríe, que coopera en comunidad.
 La raza humana debe sobrevivir. 
Porque somos los seres conscientes del planeta. 
Porque somos los que podemos cambiar el destino, y terminar con los graves problemas mundiales.”
Hugo Baronti

Fenatral

Fenatral