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Somos la Federación Nacional de Sindicatos de Trabajadores de Empresas Lácteas y de los Alimentos de Chile, FENATRAL, fundada el 21 de marzo de 1988.
Federación abierta que agrupa Sindicatos de Soprole, Prolesur, Comercial Santa Elena, Quillayes-Peteroa, Lácteos del Sur, Diana Naturals, Lácteos Kumey, Recex y recientemente Sindicato de empresa Elabal y al día de hoy, congregamos sobre los dos mil trabajadores.
Estamos afiliados a la Confederación del Alimento de Chile, Confedach, y a través de ella a la Central Unitaria de Trabajadores, CUT y a la Unión Internacional de Trabajadores del Alimento, U I T A.
Los invitamos a participar en este proyecto, compartiendo información, navegando en los temas expuestos, enviando sus comentarios, aportes y críticas, e invitando a otras organizaciones y amigos a visitar y a enlazar esta página.
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sábado, 5 de junio de 2010

Día Mundial del Ambiente, 5 de junio

Desde el año 1973, los 5 de junio de cada año se celebra el Día Mundial del Ambiente que fue establecido por la Asamblea General de Naciones Unidas, en su Resolución (XXVII) del 15 de diciembre de 1972 con la que se dio inicio a la Conferencia de Estocolmo, Suecia, cuyo tema central fue el Ambiente. Ese mismo día, la Asamblea General de la ONU aprobó la creación del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). Cuya misión es: Proporcionar mando y animar la sociedad en preocupación para el medio ambiente, inspirando, informando y permitiendo a naciones y pueblos mejorar su calidad de vida sin comprometer las de las generaciones futuras. Esto se refleja en lograr disminuir la contaminación, y tener una actitud sustentable al usar las materias primas que entrega la tierra.
Para ayudar a cuidar el medioambiente: 3R
Cada uno se cuestiona qué puedo hacer en este sentido, cómo puedo ayudar a disminuir la contaminación, cómo colaborar a la preservación del Medioambiente, la respuesta está mentalizar las 3R, actitud que va bastante más allá de plantar un árbol . . . al año!!

Reducir - se refiere reducir el volumen de los residuos.
Por ejemplo, consumir productos con empaques más pequeños o empaques elaborados con materiales biodegradables o reciclables.
Reutilizar - se refiere a utilizar los materiales que aún pueden servir, en lugar de desecharlos. Por ejemplo, utilizar botellas de PET o vidrio para almacenar agua, aceites o alimentos.
Reciclar - se refiere a transformar los materiales de desecho para crear nuevos productos.

Por ejemplo, transformar botellas de PET de desecho en fibras sintéticas para la confección de prendas.
Aunque estos son los elementos que componen el concepto de 3R, actualmente también se hace referencia a los siguientes conceptos:
Rechazar - rechazar aquellos productos o materiales que se convertirán en basura.
Reparar - aunque se descomponga el producto, se repara para poderse seguir usando.
Repensar - pensar en el momento de la compra si realmente es necesario.
Rentar - rentar en lugar de poseer de manera personal.
Regresar - regresar a distribuidores los artículos cuya vida útil haya terminado, como los teléfonos celulares.
Reformar - rehacer o reconstruir productos como ropa, zapatos, entre otros para que puedan utilizarse nuevamente.
Reconvertir a energía - aquellos residuos que no puedan ser reutilizados, pueden generar energía a través de su incineración.
Debido a la introducción de estos conceptos, hay quienes hablan de 4R ó 5R.
Paradojicamente, en estos días posteriores al 27F, el aumento desmedido en la cantidad de desechos plásticos, por embalajes y otros, es altísimo en aquellos lugares que han debido recibir donaciones solidarias.
La otra cara del medio ambiente


La Piratería con Pinzas: Sobre la Propiedad Privada en la Naturaleza
En el Día Internacional del Medio Ambiente un tema espinudo para debatir, donde los principales antagonistas son cientificos universitarios del primer mundo, llamados hoy de neocolonialistas, si antes andaban tras el oro hoy son las hierbas.
"La tierra es la madre", dice un indio flojo y cansado unos metros más allá, mientras unos señoritos de blanco impoluto y botas, le sacan unas hierbas inocuas, unas hierbas que le crecen a ramas por el potrero, con sus guantes pretenden no mancharse la manos de barro o savia.
Es un acto que pasa casi desapercibido pero que ya desde hace bastante tiempo se lleva a cabo. Un ejemplo: Un buen día el Señor Loren Miller descubrió, en la chacra de un indio no aislado de la Amazonía ecuatoriana, una variedad de la liana que sirve de base a una bebida sagrada, el yagé o Ayahuasca. Feliz con su "descubrimiento", el señor Loren Miller, volvió a casa y la patentó en beneficio de su empresa, la International Plant Medicine Corporatión. Los indios no aislados asociados a la COORDINADORA DE ORGANIZACIONES INDIGENAS DE LA CUENCA AMAZÓNICA (COICA) emitieron un comunicado deplorando la hazaña y advirtieron que no se responsabilizarían de la seguridad física del Sr. Miller en caso de que volviese a sus Safaris. A la Inter-américan Fundation, institución pública de cooperación, le pareció mal educada la actitud de la COICA y canceló las subenciones que otorgaba a esa organización.
Para Oscar Calavia Sáez, antropólogo de la Universidad Federal de Santa Cararina (Brasil) la propiedad y el robo son caras de la misma moneda, "se vive entre la dádiva y el expolio, usando, pensado o plantando lo que otros antes usaron, pensaron o plantaron", señala el experto. Este suceso se lleva a cabo a lo largo de toda América.
Y en Chile
Cabe señalar que si bien la flora y fauna chilena no es tan pletórica como aquella ubicada en los paises de la cuenca amazónica, el 80% de todas las plantas que existen en Chile son nativas, con características especiales dado nuestro aislamiento geográfico. Algunos extranjeros ya han patentado la Murtilla, el boldo, quillay, quinoa, en fin. Se cree que son unas 700 las especies nativas chilenas que han sido o están en proceso de ser registradas en paises extranjeros; sin que en Chile exista legislación para regular este fenómeno.
Jorge Bermúdez, Doctor en Derecho Ambiental en la Universidad de Geissen (Alemania) y miembro de la comisión de bioética de la Universidad Católica de Valparaiso afirma que: "Chile firmó el protocolo de Cartagena el Año 2000, que regula el tránsito, importación e internación de organismos geneticamente modificados, pero no lo ha ratificado", dicha precariedad avisa el cientifico, deja al descubierto una sombra por donde se siguen colando especies.
Todo se debe a una desfachatez y estupidez jurídico ambiental, el debate aletargado de los proyectos de ley que duermen de junto a sus diputados y senadores, mientras los poderosos foráneos siguen con gran zalagarda. Oscar Calavia, autor del extenso artículo "Biopiratería: Mitos, ley y política", explica que "en el debate sobre la propiedad intelectual se enfrentan dos tipos de discurso. Uno de ellos sostiene que ella es la savia de la investigación científica. Sin una adecuada recompensa, nadie dilapidaría el ingenio y las inversiones necesarias para la innovación tecnológica. El otro argumento rebate que la propiedad intelectual es una argucia que tiende a privatizar la naturaleza y el vasto acerbo de los saberes comunes".
De una u otra forma las leyendas, la lengua, las curativas hierbas siguen viajando en cajas y cofres modernos para saciedad del mercader, en este caso farmaceuticos. Lo que viaja es el tuétano de la vida, lo que viaja es la semilla o en definitiva son los datos que permiten la reproducción alquímica de ella en otra latitud. Luego de que esto es logrado, la indagación cientifica se preocupa de saber lo escencial para transformarlo en un medicamento envasado y vendible a todo el mundo, incluyendo a las minorías trajinadas.
Contra la verdadera Piratería
Y mientras las gabardinas parlantes aún no se mueven, existen experiencias comunitarias y femeninas que están actuando. Se trata de la Asociación Nacional de Mujeres Rurales e Indígenas (ANAMURI), quienes mediante su Campaña mundial de la semilla pretenden "rescatar las semillas naturales libre de la prisión que significa la patentación. Así mismo promueven el conocimiento de la cultura ancestral en relación a la agricultura orgánica libre de semillas transgenicas, pesticidas, abonos químicos y venenosos".
Es así como comienzan a generarse estas redes fuera del inefectivo y malgastado poder estatal, fuera del yugo partidario y cada vez más enfrentado a los intereses económicos. Los piratas cuentan con percebes en los cascos de sus jets y barcos, percebes que minuto a minuto comen la estructura base de su glotonería.
http://www.elrepuertero.cl/admin/render/noticia/2201
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http://www.unep.org/

1 comentario:

  1. Chilenos normales o tontos: Cada uno decide
    “Hay dos grupos claramente definidos. Quienes respetan a la gente y quienes no lo hacen. Elijamos de una buena vez a cuál de ellos queremos pertenecer. No sólo hagamos discursos a nivel de familia, vecinos, amistades. Si decidimos que somos del equipo de los tontos que ensuciamos nuestros propios nidos, por lo menos respetemos a los que procuran el bien común”.
    Guillermo Retamal Bermedo (Periodista)
    Hace poco se celebró el Día Mundial de la Tierra. No hubo aspectos novedosos salvo los reiterados llamados a cuidar el medio ambiente. Sin embargo, llamó la atención en todas las secciones de cartas al director enviadas a los distintos diarios de circulación nacional, que la gente crea que se debe educar a los niños para que cuando sean adultos cuiden el planeta.
    Queda claro entonces. Los mayores somos incapaces y nuestra esperanza son los niños. Era de creer que bastaba con iniciar acciones individuales en materia de medio ambiente.
    Más bien actitudes domésticas, partiendo por las bolsas de basura o las fecas de nuestras mascotas que con frecuencia invaden nuestras veredas.
    Vayamos al grano. Por lo general, cuando una persona sabe que determinada actitud es contraria al bien común, se abstiene. Si no lo hace, es considerada anormal. O sea tonta. O sea paciente psiquiátrico. La verdad es que contribuir por acción, omisión o simple negligencia a ensuciar nuestras veredas y calles es bastante anormal.
    Pero los chilenos somos partidarios del eufemismo. De las cosas dichas a medias. Si yo arrojo desperdicios en lugares no habilitados, entonces soy mal educado. ¿Será tan así de simple? Si me dicen mal educado a mi edad, en el fondo me están diciendo tonto porque ni con los años he logrado aprender algo tan básico.
    Hagamos corto y fácil el adjetivo entonces. Definitivamente, si me comporto en contra del bien común, soy tonto y punto. Nada de dejar la responsabilidad de proteger el medio ambiente a nuestros niños. Hay que asumir la tontera propia para entendernos adecuadamente en un país donde la gente normal respeta mínimas normas medio ambientales, y donde los tontos actúan con negligencia y hasta con insolente prepotencia y falta de consideración hacia los demás
    Un país de gente normal, mentalmente hablando, y tontos. Es así de simple. Parece agresivo, pero es que en algún momento se deben poner los adjetivos que no son políticamente correctos.
    ¿Usted arroja desperdicios a la calle a sabiendas que es malsano y feo? Entonces usted es tonto. Lo demás es puro romance. Trate de copiar a la gente normal o vaya al doctor, o métase una bala, pero no moleste a la gente que sólo busca vivir en paz y con un ambiente relativamente limpio. Hágalo antes que el erradicado sea usted, porque sin duda el cuidado del planeta será un día motivo de luchas entre los responsables y los irresponsables.
    De paso, debe decir que algún exitoso empresario que arruina su entorno mientras gana plata por millones, puede ser muy pillo, astuto o como quiera llamarse, pero sigue siendo un tonto despreocupado por el lugar donde vivimos todos. Hasta despreciable porque desprecia a los demás.
    Si yo actuara como tarado en materia de medio ambiente o en cualquier otra cosa en que demuestre absoluta indiferencia por las personas, entonces no podría ofenderme si me califican de tonto. Las cosas por su nombre.
    Al menos en el periodismo es bueno a veces decir los adjetivos correctos. Sin miedos ni vacilaciones.
    Hay dos grupos claramente definidos. Quienes respetan a la gente y quienes no lo hacen. Elijamos de una buena vez a cuál de ellos queremos pertenecer. No sólo hagamos discursos a nivel de familia, vecinos, amistades. Si decidimos que somos del equipo de los tontos que ensuciamos nuestros propios nidos, por lo menos respetemos a los que procuran el bien común.
    http://www.percepcion.cl/opinion14.html

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